10/3/09

I go to sleep



Hay un televisor de bulbos apagado al fondo de la habitación, una tornamesa del lado izquierdo que ya no funciona pero que uso de mueble, dos mesas, una de las cuales está junto al único sillón y en el cual estoy sentado fente al televisor, la otra mesa está frente a la ventana del lado contrario a la tornamesa. No todo está tan ordenado, y mucho menos hoy.

No sé qué pasó, así de repente se te ocurrió soplarle a todo y destruir el mundo que construí para nosotros dos, soplaste y tiraste mi casa de polvo y arena, es que ni si quiera había lágrimas que le dieran firmeza a mi hogar, quizá fue eso, no sé como no lo había pensado, ¡era eso!, nos faltaban peleas, diferencias, golpes, lágrimas y reconciliaciones, nos hacía falta ése subir y bajar del cielo al infierno, nos hacía falta a veces salvarnos a nosotros mismos, o quizá odiarnos a nosotros y apoyarnos con navajas bajo los genitales. Creo que era un exceso de felicidad, era demasiado divino.

Ya se acercan esos pinches puercos, pero seguramente no van a entender lo nuestro. Me harán preguntas similares para alimentar mis mentiras y hacerme vomitar la verdad, pero lo primero que verán será tu cuerpo blando sobre la banqueta, y mirarán hacia arriba buscando en el cielo una respuesta menos horrenda, pero las cosas son así: sólo quiero estar contigo, crearte un mundo liviano, ligero, alejado de los que te dijeron que era un loco, quiero alejarte de tus fantasmas y los míos.

Yo sé que cuando estas pastillas hagan efecto despertaré junto a ti, listo para crear castillos de arena indestructibles.

No hay comentarios:

Publicar un comentario