17/10/13

Sin pies ni cabeza, puro corazón.




"Ama lo que haces" te dicen desde que es bueno decidir lo que harás toda tu vida, "ama lo que haces". Pero nadie te dice que amar no es precisamente un fin ni un camino, y que además el amor no te va a acompañar en el miedo y el dolor y el certero abandono.

Por eso creo que lo que amo es el camino, sin destino, no lo entiendo aún pero me agrada no saber a dónde voy, me agrada disfrutar del paisaje y mirar como se transforma el camino y el cielo, como a veces el cielo esta aborregado y otras tan luminoso que es cegador, y ni hablar del camino a veces con pasto y libre de rocas y otras con tierra que se eleva con un intenso olor a orina que se eleva cuando le pisas.

Digo que creo que lo que amo es el camino, porque, la verdad, ni de eso estoy seguro. Sólo voy mirando y construyendo mi hogar mientras camino, un hogar que pueda habitar en mi vejez incierta, un hogar que ahora que estoy joven puedo cargar con él pero que sé que seguramente se reducirá a lo indispensable cuando me de cuenta de ello y cuando mi cuerpo me lo exija. Como el caracol.